Paroles/Images/Vitez

Paroles/Images/Vitez

Año:

Duración:

125′ Min

País:

Francia

Idioma:

Francés

Direccción:

Dominique Baumard

Productores:

Eva Chillón, Nathalie Trafford

Elenco principal:

Maxime Kerzanet, Damien Houssier

Guion:

Antonine Vitez,

Emile Kopfermann,

Louis Aragon, Dominique Baumard

Direccion de fotografía:

Dominique Baumard

Montaje:

Dominique Baumard

Sonido:

Dominique Baumard

Horarios

Fecha/HoraTeatroCiudad
Martes 16 de septiembre | 5:30 p.m.Centro Colombo Americano - Sede centro. Sala 1 Medellín

Direccción:

Dominique Baumard

Se graduó en 2009 de La Fémis, la escuela nacional francesa de cine. Ha dirigido nueve cortometrajes. Fue seleccionado para participar en el programa Emergence para jóvenes cineastas prometedores.

Sinopsis

Sinopsis

Esta película no tuvo realmente un cierre definitivo: nunca se estrenó propiamente. Pablo García Canga la vio porque es un gran amigo de Dominique. La película es sobre la preparación de un espectáculo teatral que hicieron dos actores, Damien Houssier y Maxime Kerzanet, a partir de textos de Antoine Vitez. Antoine Vitez fue un gran dramaturgo francés. Entre otras cosas, fue quien encarnó a Vidal, el opuesto integral de Jean-Louis, en Mi noche con Maud, de Eric Rohmer. Su apellido puede confundirse por como se dice la palabra velocidad en francés. Esta es una película veloz. Sobre ella, dice Canga: “es de un flujo constante, como un río, del que se puede salir pero en el que al volver a entrar te arrastra la corriente”. Los actores se preparan rigurosamente. Dominique Baumard los filma durante todas las fases del trabajo.

Reflexión

Reflexión

Reflexión

Reflexión


Sólo con el título ya se atisba la riqueza de esta película. Están las imágenes que, entre las palabras (paroles) y el apellido de Antoine Vitez (el actor y director francés), interrumpen el encuentro natural entre la palabra escrita, lugar que habitó Vitez con tanta frecuencia y talento, y la figura misma del autor (que está ausente como apariencia física, sólo remotamente fijo y algo oculto en un retrato que cuelga en una habitación). Este montaje de elementos, que las barras inclinadas ya dibujan con cierta rigidez, asemeja la forma de la película: imágenes que en principio interrumpen el flujo de las palabras de Vitez. Sin embargo, la película revela en su montaje una relación aún más emocionante y tensa entre el texto y la imagen, puesto que la sucesión de imágenes no sigue un orden narrativo, ni cronológico, ni espacial: sigue el orden del texto. Damien Houssier y Maxime Kerzanet son dos actores que trabajan sobre el texto teatral Paroles/Vitez (escrito por Houssier) para conmemorar en 2009 el vigésimo aniversario de la muerte de Vitez. El texto de la obra es un ensamblaje de fragmentos provenientes de obras de teatro, cartas, poemas (propios y también de autores como Louis Aragon, maestro del difunto artista). Y no podría ser de otra manera, porque ¿de qué otra forma se puede construir la memoria de alguien si no es a raíz de fragmentos? Lo maravilloso es que estos fragmentos son el hilo que une a la película. La transición de un plano a otro se da por la continuación del texto, lo que hace de esta película una especie de flujo de consciencia o de lectura en voz alta que parece no ser interrumpida. Aunque esto también vale la pena matizarlo pues, aunque el texto rige el ritmo, veremos a Houssier y Kernazet reaccionar con humor, reinterpretar su significado, repetir las frases, omitir otras. El resultado de este ejercicio es algo que el teatro en sí mismo no se podría permitir, puesto que durante una función sólo existe el instante del aquí y ahora. En cambio, esta película se asemeja a la obra que se vería en escena, pero intercalada por la imagen (de otra forma imposible) del proceso creativo. Con aire brechtiano, es posible ver las costuras y los cimientos que sostienen la obra, siempre señalando y recalcando que el artefacto finalizado, aunque a veces intente borrar las huellas de su origen, carga siempre el rastro del proceso. Gracias a esto puedo retomar la relación entre imagen y texto, que en un principio describí como tensa, y en realidad revela la belleza del gesto. La repetición del texto por Kernazet implica ver la transformación del gesto y en general de todo el cuerpo gracias a la palabra. El cuerpo está hecho en la entonación y la interacción con el espacio, pero estos elementos, que la cámara fija (casi toda la película existe sólo con planos fijos) captura con cuidado y cercanía, son la prueba de que el cuerpo del actor está hecho del texto que lo atraviesa. Quisiera cerrar rescatando unas palabras de Vitez –que a su vez fueron recogidas por Houssier en su texto– en las que él habla sobre la atención y el silencio: “La atención, el silencio, [son] necesarios (es quizá aquella también, nuestra tarea: proponer dos horas de atención, de silencio. Esa paciencia de la que hablaba Debauche). El contrario de la demagogia”. En esta consigna radica la belleza de Paroles/Images/Vitez, ya que propone el espacio del silencio, la invitación a la paciencia y la observación con los elementos mínimos. Hecha con una sola cámara, tres personas (dos frente a cámara y una detrás) y una grabadora de sonido. Un ejemplo contundente de preciosa sutileza que no busca llenarse de aplausos, sino hacer del cine un espacio donde la palabra teje el ritmo de la imagen (mientras el público observa en su silencio cómo la película se hace en el momento en que se observa).

DANIEL ZORRILLA ROMERO
Abrir chat